"La energía es una información en movimiento"
Dr. Jean-Louis Brinette, 1992.
La Etiomedicina es una técnica de acompañamiento al paciente que tiene como objetivo encontrar el origen emocional de las patologías. Creada en Francia por el doctor Jean-Louis Brinette, la Etiomedicina es una terapia energética que concibe al paciente en su globalidad, es decir, física y emocionalmente.
El doctor Brinette entendió que la Medicina Occidental se enfocaba cada vez más en la disección del Hombre, en la disasociación de las diferentes partes que forman al Ser, y que esa disección había dejado de lado el impacto que ejercen las emociones en nuestro cuerpo. Brinette se basó en la Medicina China, la cual tiene como objetivo primordial la prevención de las enfermedades, y no solamente la solución del padecimiento.
La energía generada por las emociones impacta directamente el estado físico del paciente, tanto de manera positiva como negativa. Las experiencias positivas permiten al Ser Humano crear la etapa siguiente, continuar construyendo sus experiencias, seguir fluyendo. Por otro lado, las experiencias dolorosas generan una energía negativa que lo va encerrando en una predisposición a situaciones que se asemejen a la experiencia que le ha causado daño. Si la persona no logra "digerir" esa información, la memoria de esta última quedará guardada en el cuerpo y buscará manifestarse. Esta memoria actuará como una presa que, al cerrarse, impide el flujo natural del agua, la contiene. Mientras mayor sea la contención de la energía, mayor será la manifestación física.
Angustia, miedo, ira, tristeza, frustación y muchas otras más emociones pueden ser el origen de un sinfin de enfermedades, que pueden ir desde dolores crónicos, alergias, ansiedad, insomnio, cicatrices queloides o dolorosas, dermatitis, migrañas, cansancio extremo, hasta repeticiones de comportamiento o de esquemas, estados depresivos, etc.
La Etiomedicina ayuda al paciente a identificar el bloqueo emocional (la vivencia o el condicionamiento social que origina su padecimiento). Por medio de la identificación, el paciente se vuelve capaz de reconectar las emociones (y/o sus manifestaciones físicas) con la experiencia traumática, es decir, volverse consciente del origen. La verbalización juega un papel esencial en el proceso de sanación, pues es através de ella que el paciente se puede sentir escuchado, comprendido y por consiguiente, liberado de su carga emocional. Una vez el sufrimiento liberado, es decir, una vez "desbloqueado", la energía fluye libremente de nuevo y el paciente recupera su capacidad de sanar.
